Artículo: Pros y contras del ejercicio físico autodirigido - Campus Virtual
Pros y contras del ejercicio físico autodirigido
A partir del inicio de la cuarentena hemos visto casas y apartamentos de todos los tamaños convertidos en oficinas, aulas de clase y gimnasios, aún así es innegable que esta cotidianidad de estudio y trabajo en casa está generando, en algunas personas, niveles de sedentarismo perjudiciales, pues sus consecuencias se ven reflejadas en los sistemas muscular, cardiovascular, endocrino y nervioso. Además, si a esto le sumamos las largas jornadas de uso continuo de computador, que por lo general llevan a adoptar posturas corporales inadecuadas, vemos que poco a poco las afectaciones para la salud van aumentando y empiezan a sentirse con el paso de los días.
Esto ha llevado a que muchas personas busquen formas de activarse físicamente para disminuir las posibles lesiones musculares y en general el estrés, y la primera fuente para eso es internet. Sin embargo, la oferta que hay en la red puede generar confusiones, porque en medio de tanta información es difícil saber qué es lo más pertinente. Es común que se confunda actividad física y ejercicio, y esto puede traer como resultado riesgos para la salud, logrando un efecto contrario al que se busca en relación con el bienestar.
Por eso, en el Campus Virtual Javeriana, queremos presentarte algunas reflexiones sobre estos conceptos con la ayuda de los profesionales expertos del Centro Javeriano de Formación Deportiva. Empecemos por describir algunos aspectos básicos a tener en cuenta sobre el entrenamiento autodirigido. Veamos:
La actividad física
Se define como cualquier movimiento corporal producido por la contracción muscular y que en consecuencia resulta en un mayor gasto calórico. (Carspersen, Kenneth Powell, & Gregory Christenson, 1985).
La Organización Mundial de la Salud determina tres niveles de intensidad para realiza actividad física a partir del consumo energético medido en METS (Unidad de índice metabólico: un MET es la cantidad de oxígeno que consume una persona en situación de reposo)
- Actividad física de baja Intensidad: 2,0 a 2,9 METs, por ejemplo ordenar la habitación.
- Actividad física moderada: 3,0 a 5,9 METs, por ejemplo, caminar a paso rápido.
- Actividad física vigorosa: > 6,0 METs, por ejemplo, correr.
Con base en esto, podemos decir que el ejercicio físico es una manifestación de la actividad física, que se caracteriza por ser planificada, estructurada y realizada de manera repetitiva en el tiempo, teniendo como objetivo fundamental la mejora o el mantenimiento de la condición física. Por lo tanto, la oferta masiva que hay en redes sociales hoy corresponde al concepto ejercicio físico.
Si el objetivo de una persona es disminuir el sedentarismo la recomendación es optar por la actividad física moderada o el ejercicio físico teniendo en cuenta sus antecedentes fisiológicos. Los beneficios que esto trae a la salud son: la mejoría en la condición cardiorrespiratoria, el fortalecimiento de músculos esqueléticos, tendones y ligamentos, un fortalecimiento en el equilibrio energético y control de peso, la disminución del riesgo de lesiones usuales como esguinces, la disminución del riesgo de hipertensión arterial, diabetes y otras enfermedades crónicas no transmisibles. (Organización Mundial de la Salud, 2010).
Como sabemos que hoy cada persona está resolviendo por su cuenta qué hacer para tener una vida físicamente activa y lo hace de manera autodirigida, queremos recordar la importancia de tener presente que los procesos de aprendizaje autónomo se deben autorregular tomando conciencia de lo que se aprende y cómo se percibe; la persona aprende por sí misma a resolver los problemas con que se enfrenta, cuestionando, revisando, planificando, controlando y evaluando su propia acción. (Crispín, 2011) .
Ahora queremos presentarte los pros y contras del ejercicio autodirigido para que, al hacerlo, puedas tomar las mejores decisiones:
Pros del ejercicio físico autodirigido
- Libertad para la selección de horarios acorde con las labores diarias.
- Adaptación al espacio físico y recursos individuales.
- Posibilidad de escoger entre múltiples opciones sin depender de instructores, actividades o tiempos establecidos.
- Acceso a múltiples plataformas tecnológicas provenientes de diferentes contextos culturales y sociales de forma gratuita y adaptables a cualquier tipo de perfil.
- Posibilidad de complementar el trabajo autónomo con sesiones pregrabadas gratuitas de numerosas manifestaciones de ejercicio físico disponibles en las redes sociales, lo que permite tomar decisiones sobre la ejecución a nivel de repeticiones, intensidades y cargas.
Contras del ejercicio físico autodirigido
- Manejo no controlado de intensidad que puede propiciar lesiones musculares o tendinosas al no contar con un acompañamiento en el momento de la práctica. (Córdova, 2020)
- No percibir mejoras en la condición física, ya que no se pueden establecer metas acertadas que normalmente irían de la mano de valoraciones físicas rigurosas.
- Desmotivación al no contar con un referente experto que ayude a poner retos pertinentes a su contexto y de acuerdo a la evolución del proceso.
- Falta de apoyo o asesoría nutricional, variable indispensable a tener en cuenta para llevar a cabo un proceso exitoso de ejercicio físico.
En conclusión, la búsqueda de cada persona para romper el comportamiento sedentario es diferente. Sabemos que para eso la práctica de una actividad física de forma rutinaria es fundamental y aunque hay una gran oferta, es recomendable tener acompañamiento profesional para establecer objetivos claros de acuerdo con cada persona y poder evaluar constantemente la evolución y resultados.
En la U, el Centro Javeriano de Formación Deportiva (CJFD) ha establecido varios planes de ejercicio físico que se hacen en vivo, a través de plataformas virtuales y con un acompañamiento constante por parte de profesionales expertos, en donde como integrante de la comunidad académica puedes acceder a:
- Programa de Entrenamiento Personalizado (PEP).
- Programa de Ejercicio Físico para Egresados (EFE).
- Programa de Acondicionamiento Físico para Empleados (PAFE), así como también, el desarrollo de pausas activas, es decir, intervenciones cortas con actividad física en reuniones, clases y momentos de descanso laboral y académico.
Este artículo fue escrito por Mario Silva Alvis, profesional del CJFD
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